El ballet es una grande fuente de inspiración para los diseñadores. Los vestidos tanto de entrenamiento como los que se ponen los bailarines para realizar una representación están diseñados pensando a los movimientos que estos grandes artistas realizará. De ahí que los estilistas eligen los mismos modelos y los adaptan al dia a dia de una mujer.
Esta vez me he inspirado en ellos para realizar estos diseños.
El primero lo podríamos definir como el tipico ropaje de entrenamiento, sudadera asimétrica, leggins y leg warmer.
El segundo vestido es una delicia delicada, una falda a rueda con tul en rosa, lila y rosa claro que se combina con un completo de twin-sets en color rosa palo.
Para finalizar una chaqueta inspirada al protagonista masculina del lago de los cines. Ajustada en el cuerpo y con movimiento y volumen en las mangas con pequeños adornos dorados en las mangas y en el cuerpo de la chaqueta. Mientras que la falda a tubo es asimétrica en la parte trasera.
El ballet es así elegante, delicado que puede inspirar a todo el mundo.
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